Cómo hacer Leche Condensada Casera receta fácil
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Si alguna vez has soñado con preparar tu propia leche condensada en casa, esta receta es todo lo que necesitas. Este básico de la repostería, tan dulce como versátil, se puede elaborar con solo cuatro ingredientes que probablemente ya tienes en tu cocina: leche, azúcar, mantequilla y, si quieres, un toque de vainilla. El resultado es una mezcla cremosa, perfectamente dulce, y con un sabor auténtico que hará que te olvides de las versiones comerciales.
La leche condensada casera no solo es fácil de preparar, sino que también te permite ajustar su dulzura y textura a tu gusto. Además, no contiene conservantes ni aditivos, lo que la convierte en una opción más natural y económica para todas tus recetas favoritas. Desde postres como flanes y tres leches, hasta bebidas como cafés y batidos, este ingrediente se adapta a todo tipo de preparaciones.
Imagínate vertiendo una cucharada de esta leche condensada recién hecha sobre unas fresas frescas, usándola para darle un toque especial a tus brownies o incluso incorporándola en helados caseros. ¡Las posibilidades son infinitas! Y lo mejor de todo es que no necesitas ser un experto en la cocina para lograr un resultado espectacular.
El proceso es sencillo: al calentar la leche y el azúcar, los ingredientes se transforman lentamente en una crema suave y sedosa gracias al calor y la magia de la cocina. La mantequilla aporta una textura aún más rica, mientras que la vainilla opcional añade una nota aromática que eleva el sabor a otro nivel.
¿Estás listo para experimentar el placer de hacer tu propia leche condensada? Con esta receta, disfrutarás de ese sabor clásico que todos amamos, pero con el orgullo adicional de saber que lo hiciste tú mismo. ¡Ponte el delantal y empieza a endulzar tu mundo con esta delicia casera!
Ingredientes
1 taza de leche entera líquida
1 taza de azúcar
2 cucharadas de mantequilla sin sal
1/2 cucharadita de vainilla (opcional)
Preparación:
En una cacerola de tamaño medio, agrega la leche y el azúcar.
Calienta a fuego medio, removiendo constantemente hasta que el azúcar se disuelva completamente.
Reduce el fuego a bajo y deja que la mezcla hierva lentamente.
Remueve de vez en cuando para evitar que se pegue o queme. No dejes que hierva a borbotones.
Deja que la mezcla se cocine a fuego lento durante 30 a 45 minutos o hasta que espese y se reduzca aproximadamente a la mitad de su volumen.
Una vez que la mezcla esté espesa, retírala del fuego.
Agregar la mantequilla y la vainilla (si se desea) y revuelve hasta que la mantequilla se derrita y se integre completamente.
Deja enfriar la leche condensada hasta que esté completamente fría.
Vierte en un recipiente limpio o en un frasco hermético y guárdalo en el refrigerador.
Se espesará más al enfriarse.
Listo!
Muchas Gracias…